El pasado Viernes de Dolores, 31 de marzo, los alumnos de 3º de E.S.O. visitaron la Basílica del Dulce Nombre de Jesús y María Santísima de la Paz, donde pudieron disfrutar del grandioso patrimonio de esta Archicofradía, obras como el Niño Perdido, Dulce Nombre de Jesús Nazareno, el Santísimo Cristo de la Buena Muerte y de la Paz o Nuestra Señora de la Paz Coronada.
Además, dos de nuestros alumnos, Juan Francisco Morán y Lourdes Estepa, nos dejaron boquiabiertos con las maravillosas saetas que le cantaron a la Virgen.
Le damos las gracias a la Cofradía por el buen recibimiento y trato que nos dió durante la visita, desde el colegio María Inmaculada les deseamos lo mejor para este Viernes Santo.
Mientras, el alumnado de 4º de ESO tuvo la oportunidad de visitar la iglesia de Santa María de Jesús, sede de la Archicofradía del Socorro. Allí fuimos amablemente recibidos por miembros de su Junta de Gobierno quienes nos explicaron con detalle la historia de este antiguo convento franciscano fundado por los frailes Terceros en 1527.
Pudimos contemplar los sagrados titulares de esta archicofradía, dos de ellos ya engalanados en sus tronos: la Santa Cruz de Jerusalén y Nuestro Padre Jesús Nazareno. Pero, lo más impactante fue subir al camarín y admirar en primerísimo plano la imagen de Nuestra Señora del Socorro.
También visitamos el museo de la cofradía donde nos mostraron el antiguo y valiosísimo patrimonio de enseres que alberga, todo ello magníficamente explicado por d. Gerardo García Sobrino.
Desde aquí queremos agradecer a la Junta Directiva su generosidad por permitirnos esta visita en fechas tan ajetreadas para ellos y por hacer posible que nuestros alumnos conocieran de cerca la impresionante historia y riqueza de la Archicofradía del Socorro.
Los alumnos de 1° de bachillerato visitamos la Iglesia del Carmen y la cofradía que tiene su sede canónica allí: la cofradía de la Soledad.
Tras admirar los tronos ya preparados para su salida procesional del viernes y admirar el entorno barroco que lo aloja, pudimos disfrutar de su casa de hermandad.
Pudimos admirar sus enseres y disfrutar de cosas tan importantes en la hermandad como las sayas de la Virgen, que con tanto cariño se conservan.
Hemos sido testigos de un fervor cofrade y un esfuerzo por su conservación. Un Viernes de Dolores muy bien aprovechado.